Por Excélsior

Durante la presentación del nuevo modelo educativo, el presidente Enrique Peña Nieto llamó a los pares de familia, a los maestros y a las autoridades a llevar a cabo la “revolución educativa más importantes del país” con el nuevo modelo educativo.

El mandatario aseveró que el sistema educativo anterior tenía rezagos y retrasos, por ejemplo, en los planes, programas y enfoques pedagógicos, perdiendo fuerza como instrumento para abatir la pobreza y la desigualdad.

Además, que dicho sistema también frenó el crecimiento de los estudiantes, así como de los maestros, y no transparentaba el ingreso y promoción de éstos.

Teníamos un sistema que dejó en el olvido a las escuelas, su infraestructura y su organización; que creó estructuras verticales y burocráticas, desalentando la innovación y la creatividad.

“Impedía a los maestros tener una carrera en el mérito y no transparentaba el ingreso y la promoción de los educadores”, afirmó.

Por ello, destacó que sin la Reforma Educativa y el nuevo sistema educativo el país podría retrasarse en la materia con respecto a otros países.

Como país estaremos condenados a rezagarnos, a quedarnos muy atrás, de los avances que el mundo esté mirando. Por eso la relevancia de la transformación del sistema educativo en México”, afirmó.

Con este nuevo modelo tienen un nuevo desafío y una responsabilidad ineludibles; tienen el desafío de prepararse y ser mejores educadores para formar ciudadanos libres, comprometidos y participativos a partir de los nuevos modelos pedagógicos”, aseguró el primer mandatario.

Además, destacó que actualmente el sistema educativo mexicano es uno de los más grandes del mundo, ya que tiene 35 millones de estudiantes, dos millones de maestros y más 260 mil centros escolares.