Detienen a funcionario de Sinaloa que compró colchones ‘disfrazados’

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El coordinador administrativo de la Secretaría de Desarrollo Social de Sinaloa, Carlos Baltazar Castro Olivas, fue detenido por elementos de la Policía de Investigación cuando se trasladaba por carretera hacia Culiacán, tras dar un lote de colchones viejos disfrazados de nuevos, los cuales fueron entregados a damnificados por las lluvias en Sinaloa.

La Fiscalía General del Estado informó que se solicitó una orden de aprehensión por los delitos de peculado y negociaciones ilícitas, la cual le fue concedida por un juez de control y enjuiciamiento penal, por lo que fue detenido Castro Olivas cuando se trasladaba vía carretera desde  Guadalajara, Jalisco, hacia la capital sinaloense.

El funcionario ya fue puesto a disposición de un Juzgado de Control y Enjuiciamiento Penal de la región centro, con sede en Culiacán.   La Fiscalía inició una carpeta de investigación, derivada de una serie de publicaciones periodísticas, en las que se señaló un estado irregular en los colchones entregados como apoyo a las víctimas de las lluvias, que impactó la entidad el pasado mes de septiembre de 2018.

La Secretaría presentó una denuncia por los mismos hechos. Fue así que a través de la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción, se recabaron los datos de prueba para acreditar la probable comisión de un delito, logrando además identificar a la persona posiblemente responsable.

El empresario Baltazar Castro Blanco, padre del funcionario detenido, había declarado a los medios de comunicación que dicha adquisición se hizo sin dolo, argumentando que había sido víctima de fraude por parte del proveedor, quien está identificada como Isabel Reyes Villanueva, con domicilio fiscal en la ciudad de Guadalajara, Jalisco. Incluso, aseguró que su hijo se encontraba aún en tierras tapatías interponiendo los recursos legales correspondientes contra la empresa que hizo la entrega de dichos colchones.

De acuerdo con el empresario, el gobierno de Sinaloa fue quien le ordenó a Castro Olivas buscar más proveedores para adquirir colchones, puesto que en el estado y zonas aledañas a la región ya no había más por la alta demanda que se generó ante la contingencia.

Fue así como supuestamente el funcionario realizó la compra de un lote de mil 380 colchones a Isabel Reyes sin saber que estos estaban en mal estado, puesto que todo lo recibido estaba completamente sellado.