POR EXCELSIOR

CIUDAD DE MÉXICO.- De no tomarse acciones de fondo, el sistema de ahorro para el retiro mexicano podría tener los problemas que actualmente tiene el de Chile, en el cual, y pese a que se realizan contribuciones obligatorias de 10% del sueldo de los trabajadores, se están jubilando los primeros chilenos bajo el sistema de contribución definida con tasas de reemplazo de entre 40 y 50 por ciento.

Ello pese a que hace 36 años, cuando cambiaron el sistema en Chile, se estimaba que los trabajadores podrían alcanzar una pensión de 70%, cifra que la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), establece como ideal para vivir una vejez con un nivel de vida similar al que se tiene cuando se trabaja activamente.

En agosto pasado, se iniciaron movilizaciones sociales en Chile debido a las bajas pensiones pagadas por el sistema de capitalización, un sistema que si bien logró algunas reformas en 2008 como mejores incentivos fiscales para el ahorro voluntario, hoy no les está dando para llegar a la jubilación con 70% de su último sueldo a los trabajadores.

Otros cambios que se realizaron en el sistema chileno fue la diversificación del régimen de inversión, otorgar un bono por hijo, fortalecer el pilar solidario, medidas que requieren maduración y tendrán resultados en el mediano plazo, consideró Leopoldo Somohano, director corporativo de Planeación Estratégica de Principal Financial Group.

BOLA DE CRISTAL

El directivo estableció que México podría enfrentar una situación similar o peor que la del país sudamericano, ello porque aquí la contribución es 4 puntos porcentuales menor que allá, es decir, de sólo 6.5% del sueldo de los trabajadores.

Hoy la experiencia chilena nos regala una bola de cristal que nos muestra lo que será el futuro de las pensiones en México, si continuamos como hasta ahora, sin realizar reformas de fondo que el sistema de ahorro para el retiro necesita, y que permitan incrementar la cobertura y mejorar el monto estimado de las pensiones de los mexicanos”.

En una reunión con medios, el directivo estimó que en 2022 se pensionará el primer trabajador de la generación afore en México con una tasa de reemplazo estimada de 30% de su último sueldo o, posiblemente, con una pensión mínima o igual a un salario mínimo.

Afirmó que si bien el sistema de pensiones de contribución definida no es malo por sí mismo, también lo es que estos sistemas deberían haber estado pensados con modificaciones, situación que no sucedió y simplemente en México el sistema se congeló, no ha generado cambios que hoy son urgentes porque darán resultados en el mediano y largo plazo.

TEMA DE PESO

El directivo consideró que México requiere crear una instancia, como una secretaría de Estado, que pueda regular todos los sistemas de pensiones existentes en el país, ya que aseguró que desde su punto de vista hoy un sistema universal es muy complicado, por lo que hay que ir paso a paso y modificarlo de manera gradual.

LAS OPCIONES

Principal recordó que como empresa e industria han propuesto varias iniciativas, con base en otras experiencias internacionales y conforme a la realidad mexicana, como:

1.    Incrementar el nivel de contribución obligatoria
2.    Reinstalar los incentivos fiscales para patrones, relacionados con ahorro voluntario de largo plazo
3.    Crear un sólido y atractivo esquema de ahorro voluntario colectivo
4.    Incrementar la edad de retiro
5.    Ampliar el régimen de inversión
6.    Sustituir los fondos de inversiones actuales (SIEFORES) por multifondos “ciclo de vida”
7.    Unificar gradualmente los diferentes sistemas de pensiones existentes en el país
8.    Homologar los beneficios del sistema Ley-73 con los del sistema actual SAR-97
9.    Fomentar la cultura del ahorro, la educación previsional y la asesoría financiera profesional

APORTACIÓN

En el panorama actual, diversos estudios concuerdan que el nivel de contribución necesario para alcanzar una pensión del 70% del último sueldo requiere un ahorro constante durante la vida laboral entre 14% y 16% del sueldo base del trabajador.