SpaceX se prepara para la octava prueba de vuelo del cohete Starship, prevista para el viernes 28 de febrero del año en curso, la cual está sujeta a la aprobación regulatoria.
Tras la investigación sobre la pérdida de Starship en su séptimo vuelo de prueba, SpaceX ha realizado modificaciones tanto en el hardware como en las operaciones para aumentar la confiabilidad de la etapa superior.
Entre las mejoras destacan el rediseño de los flaps delanteros para reducir la exposición al calor de reentrada, el aumento del volumen de propulsor en un 25% y una renovación completa de la aviónica del vehículo, lo que proporcionará mayor redundancia y capacidades avanzadas para futuras misiones más complejas.
Esta misión no solo representa un avance en el desarrollo del sistema de transporte espacial más ambicioso hasta la fecha, sino que también pondrá a prueba innovaciones clave diseñadas para mejorar la confiabilidad y eficiencia del vehículo.
La transmisión en vivo del evento comenzará aproximadamente 40 minutos antes del despegue y podrá seguirse a través de su cuenta oficial de X (@SpaceX) y en la aplicación X TV.
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El lanzamiento dará inicio a las 17:30 horas (hora central de Estados Unidos), aunque, como en toda prueba de desarrollo, el cronograma es dinámico y está sujeto a cambios.
Esta prueba se centrará en metas no alcanzadas anteriormente, incluyendo el primer despliegue de carga útil de Starship y varios experimentos de reentrada para evaluar la viabilidad del regreso de la etapa superior al sitio de lanzamiento.
Durante la misión, Starship desplegará cuatro simuladores Starlink en una trayectoria suborbital y se llevará a cabo el reinicio de un motor Raptor en el espacio.
Asimismo, se probarán nuevas opciones de protección térmica, incluyendo baldosas metálicas y una sección con enfriamiento activo.
Por “Milenio”
