
El sexo tántrico se trata de una práctica de origen milenario que concreta el pensamiento filosófico de oriente. El Tantra como filosofía extiende una invitación a vivir la sexualidad dentro y fuera del acto sexual, es una vía para llegar a un estado máximo de conexión energética.
Es que el Tantra propone experimentar el placer a través del uso de todos los sentidos y partes del cuerpo, incluso llegar al orgasmo de una forma no convencional. Por ejemplo; las mujeres pueden prescindir del contacto vaginal o clitoriano, lo mismo pueden experimentar los hombres sin necesidad de eyacular.
La idea es sentir placer sin involucrar los genitales. A través de técnicas como la meditación, la respiración profunda y la relajación.
Y aunque al principio podés sentir nervios, incomodidad y aburrimiento, la paciencia es fundamental, ya que los ejercicios iniciales están orientados al autoconocimiento y a la exploración de la pareja.
El contacto físico se lleva a cabo como última instancia. Y aunque la sensación puede parecerte desesperante y placentera, al finalizar te darás cuenta que habrás alcanzado varios.
La sexóloga Francesca Gnecchi manifestó que según los hindúes y los expertos “el sexo tántrico es la comunicación con el universo a través de la energía de los orgasmos”, pero para nosotros, los mortales, es simplemente el arte de “no llegar rápido”.
Por ende, presentó un curso práctico y virtual ideal para innovar y experimentar estados amplificados de conexión con uno mismo y con la pareja.
El taller es guiado por Maximiliano García, Instructor de Tantra Yoga, quien brinda conocimientos y herramientas para reconocer el potencial erótico, erógeno y orgásmico de todo el cuerpo con el fin de lograr una profunda meditación erótica vincular y estados amplificados de conexión con el propio centro de expansión sexual. La experiencia, basada y sostenida por Secuencias de Activación de Energía Kundalini, trabajos de respiración y contacto entre la pareja, es una ocasión ideal para salir de la rutina, iniciar el camino de la sexualidad tántrica, experimentar la expansión de la conciencia y aprender diversas prácticas que se pueden ejercitar en casa.
“Cuando probamos el taller con mi pareja realmente nos encantó, fueron dos horas en las que aprendimos cosas nuevas del otro y nos conectamos de una forma especial, fue un momento de unión que nunca nos habíamos permitido tener y una experiencia que nos permitió parar, dejar de hacer las cosas de un modo mecánico y comenzar a mirarnos, explorarnos y sentirnos desde otro lugar. Creo que este encuentro virtual es una buena oportunidad para conectar de esa forma con la pareja y con uno mismo, dedicarse tiempo y distenderse de todo lo que está pasando alrededor. Brinda la posibilidad de conocer y vivir algo diferente y dejar de pensar por un momento en el sexo tradicional para experimentar nuevas formas de vincularse.” explicó Francesca Gnecchi, Periodista diplomada en Sexualidad y Género y Directora de Erotique Pink.
¿Te animarías a practicarlo?
POR MDZ





