Se confirmó la formación de la tormenta tropical Helene en el Mar Caribe, dada su trayectoria se espera que territorio mexicano vuelva a ser afectado por un ciclón.
De acuerdo con el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés), se prevé que Helene se intensifique conforme avance hacia el oeste e incluso que sus vientos alcancen la velocidad de huracán cerca de Quintana Roo.
En un inicio su nombre se mantuvo como potencial Ciclón Tropical Nueve, según el mensaje emitido por el NHC.
“Se pronostica que la perturbación se fortalecerá y estará cerca de la fuerza de huracán cuando alcance el Mar Caribe el martes por la noche”, alerta en el último mensaje.
Se prevé que evolucione al llegar a la costa noreste de la Península de Yucatán.
“Se espera que el sistema se intensifique mientras se mueve hacia el norte sobre el este del Golfo de México, y podría ser un huracán mayor cuando alcance la Costa noreste del Golfo el jueves”, alertó el NHC en un aviso.
Independientemente del grado de evolución que alcance Helene, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) adelantó que, debido a su amplia circulación “originará lluvias puntuales torrenciales en Yucatán y Quintana Roo, y lluvias puntuales muy fuertes en Campeche.
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También se pronostican vientos con rachas de 50 a 70 km/h y oleaje de 1 a 3 metros de altura en las costas. De cumplirse las predicciones, Helen podría impactar en suelo quintanarroense como la mañana del 25 de septiembre.
¿Se convertirá en huracán? Por ahora, todo apunta a que sí, hay posibilidad de que la tormenta tropical alcance categoría 1 como huracán al acercarse a las costas de Quintana Roo.
Por ahora, el panorama más gris lo tienen las costas de Florida, Estados Unidos, ya que el cilclón podría impactar como un huracán mayor en los próximos días.
Cabe recordar que, además de Helene, John sigue ocacionando lluvias muy fuertes a en el suroeste de México, que se prevé, se extiendan por varios días.
“Esta lluvia fuerte probablemente causará inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra significativos y posiblemente catastróficos que amenazan la vida a los estados mexicanos de Chiapas, Oaxaca, y el sureste de Guerrero, particularmente en áreas cerca de la costa”, señaló la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA).
Por “Milenio”