Relajados y ya como una pareja formal, la modelo Tania Ruiz Eichelmann y el ex Presidente Enrique Peña Nieto presumieron su amor este fin de semana en la boda de Mar Collado y Gonzalo Zabala.
Luego de hacerse público su divorcio con Angélica Rivera, Peña Nieto volvió a verse enamorado en un evento público.
Estaban muy felices, cariñosos entre sí, muy enamorados, ella (Eichelmann) muy ilusionada. Muchos que se acercaban les deseaban lo mejor a la pareja. Al final el amor se nota, es una de las cosas que no se pueden ocultar.
Fue como una presentación en sociedad de un noviazgo formal. Como dice Juan Gabriel: ‘lo que se ve no se juzga’, era más que evidente aunque nunca se presentaron tal cual”, afirmó una fuente cercana a la familia Collado.
Durante el evento, ambos externaron muestras de cariño entre ellos. Ella, en todo momento se proyectó como una mujer sencilla ante políticos como Carlos Romero Deschamps, el Gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo, y otros funcionarios públicos.
También estuvieron de invitados personalidades del espectáculo como Yadhira Carrillo, Alejandra Ávalos y el cantante Julio Iglesias, quien deleitó con algunos temas a los más de mil 200 invitados.
Julio es una persona que siempre comparte a todos mucho cariño. Es accesible, cariñoso, bromista, es una gran estrella.
Él estuvo cantando desde su asiento en la mesa principal, donde estaba el abogado Juan Collado (padre de Mar) y su esposa Yadhira Carrillo. Fue algo muy padre, fue un palomazo en realidad porque el tecladista se sabía las canciones de Julio y en algún momento él decidió cantar”, dijo.
Iglesias aprovechó para interpretar, junto a Juan Collado, el tema “De Niña a Mujer” y dedicó algunas palabras a los recién casados.
Les aconsejó hacer conciencia de que ese paso que daban los dos iba a ser una nueva etapa en sus vidas en donde ambos tienen que practicar la paciencia, prudencia, tolerancia, palabras sabias de un señor que lo ha vivido todo”, contó la fuente.
La celebración comenzó a las 13:00 horas, en una iglesia de la colonia La Herradura en Naucalpan y la fiesta continuó en la Hacienda Jajalpa, Ocoyoacac, Estado de México. El sonido estuvo a cargo de un DJ y un grupo de música versátil en vivo.
La comida constó de cuatro tiempos: de entrada se podía escoger entre ensalada de cola de langosta o Foie Gras, como primer platillo consomé de perdiz con raviolón de Ricotta, seguido de carne de ternera con puré de papa.
Para finalizar, tres postres a elegir: cheesecake de queso de cabra, fondant de chocolate o buñuelo relleno de crème brûlée.
