Por Excélsior
México.-La actriz Mónika Sánchez, conocida en México por su trabajo en telenovelas, se fue a buscar fortuna a Estados Unidos con la idea de entrar a las grandes producciones de aquel país.
Creo que no es comenzar de cero porque el mercado latino es muy amplio. De hecho me reconocen mucho en la calle, eso abre las puertas porque todo lo que es local aquí tiene que ver con los latinos y ellos me ubican perfectamente, conocen mi trayectoria. Además, aquí hay un personaje y todos audicionan por él y no importa si eres conocido o no, lo que importa es que saques el rol”, comentó a Excélsior vía telefónica desde Chicago donde ya radica después de culminar su participación en la telenovela Tres veces Ana.
Está padre porque es audicionar para proyectos internacionales o de la liga americana, estamos hablando de cosas grandes y qué bueno poder tener acceso a ellas y quedarte, estoy muy entusiasmada. Es un reto muy interesante”, ahondó.
Favorita en los melodramas por sus villanías, Sánchez aceptó que el género atraviesa por una fuerte crisis.
“Todo tiene su ciclo y han sido más de 50 años desde que las telenovelas comenzaron en blanco y negro y el público no es que se canse, pero sí me queda claro que el grosor tiene otras opciones.
Las nuevas plataformas hacen que esto suceda, el internet, los formatos diferentes, el ritmo, las propias series, entonces las telenovelas comienzan a quedarse en una configuración que ya no es tan llamativa para las nuevas generaciones. Aunque siempre tendrán su público cautivo”, dijo.
Sin embargo, sí abogó por un cambio antes de que el fin sea inminente.
Creo que se tiene que adecuar un poco a los tiempos de ahora y a las nuevas competencias. No es la euforia de antes. También es cierto que antes no había más que la telenovela y el Canal 2, ésa es la realidad y eso le daba otra postura, ahorita hay demasiada competencia en todos los medios y es luchar para sacarla adelante”, expresó.
Comentó que no es la misma situación que se vive en Estados Unidos, puesto que la telenovela hispana vive gracias a la nostalgia.
Pasa algo muy curioso en Estados Unidos. Aquí para los latinos el poder ver una telenovela mexicana o de habla hispana es reconfortante, es una forma de no perder sus raíces y se comportan más eufóricos al verla y al identificarte en las calles”, platicó.
Dijo que con las nuevas políticas migratorias que se adoptarán en el país del norte, trabajar en aquellas tierras será complicado, pero que el latino tiene mucho que aportar.
Efectivamente se ha dicho que todo será más complicado, pero mientras uno haga las cosas correctamente no habrá problema. Que sí, los latinos la tendremos más dura, pero nunca nos avergonzaremos de nuestras raíces”, concluyó.