La diputada Eva Reyes, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos en el Congreso de Tamaulipas, urgió a un riguroso análisis de las acusaciones contra Rosario Piedra Ibarra, titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
Las acusaciones contra la Ombudsman incluyen presuntos desvíos de recursos, falsificación de documentos e irregularidades en su gestión al frente de la CNDH, organismo crucial para la defensa de los derechos humanos.
Reyes subrayó que algunas acusaciones pueden ser “impropias, indebidas o incluso orquestadas”, pero insistió en que todas deben ser investigadas a fondo para evitar la opacidad. Además, hizo un llamado a que no solo Piedra, sino también congresistas y senadores de todos los partidos, entren al escrutinio público para garantizar la rendición de cuentas.
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“El fuero no puede ser un escudo para ocultar irregularidades. Su propósito original era proteger la libertad de expresión, no crear un ambiente de impunidad”, afirmó Reyes.
La diputada expresó su preocupación por los señalamientos que, según ella, han dejado a la CNDH bajo una “oscuridad institucional” y exhortó al Congreso Federal a tomar acciones que permitan esclarecer las acusaciones.
“Es necesario que esto no quede en un tema de carpeta o encajonado. La ciudadanía merece respuestas claras”, insistió.
Por último, Reyes aprovechó para reflexionar sobre el nepotismo en la política y cuestionó el impacto de las “parentelas” en los cargos públicos, dejando entrever que los vínculos familiares no siempre son benéficos para la gestión gubernamental.
Por “Julio Manuel Loya Guzmán”
