A pesar de la debacle, el PRI no aprende
Inician trabajos de entrega-recepción a nivel estatal y municipal
Lideran demandas por despidos injustificados en Nuevo Laredo
Por Agustín García
A pesar de la debacle del Partido Revolucionario Institucional, tal parece que no aprende, porque sigue en una práctica reiterada donde reina el compadrazgo, amiguismo, nepotismo en las direcciones nacionales, estatales y municipales, además de otras prácticas nefastas, cuidando más que el bien general, proteger una desgastada “casta”, que no ha entendido que los tiempos de la fuerza monolítica del PRI ya es pasado.
Aun cuando se diga lo contrario y que Enrique Ochoa Reza, presidente del Comité Ejecutivo Nacional priista, en la práctica vemos un rosario de deficiencias políticas, que más que reposicionar la imagen de su partido, más bien parece un elemento indispensable para allanar el camino de aspiraciones presidenciales.
Porque es innegable que la llegada de Ochoa Reza al CEN del PRI, fue al más rancio y nauseabundo estilo priista, a pesar de que el discurso direccionado a “oxigenar” un ambiente que ya huele a cadáver, vemos en la práctica que todavía persiste la demagogia y la simulación, abonando a una percepción que sucumbe ante la realidad.
En primer lugar, siguen medrando los mismos actores, que fueron auténticos dinamiteros de la implosión priista, ya que no vemos capacidad de respuesta para impulsar no una reestructuración, sino que el PRI requiere cirugía mayor y si quiere reposicionarse, deberá de surgir como el Ave Fénix, de entre sus cenizas, pero esta metáfora no parece aplicarse.
Así vemos la figura pusilánime, de un Rafael González Benavides, quien como a los pájaritos, tal parece que le siguen inflando con aire, para dar la apariencia de que sigue vivo, porque nadie le ha dicho que desde hace varios meses, pasó a mejor vida.
A pesar del vendaval electoral que arrasó a su partido el pasado 5 de junio, parece ciego sordo y mudo a los reclamos internos, que exigen ya no más complicidad con malos gobernantes, porque sigue el PRI del silencio, de la sumisión y de la simulación.
Sigue imperando la voz que se dictan desde las oficinas de los Jefes del Ejecutivo o de los alcaldes para destruir enemigos y encumbrar amigos, aunque los últimos, no den el kilo en cuanto a la responsabilidad en el ejercicio.
Esta acción castrante es un muro donde se estrellan las voces que exigen la democratización de este instituto político, porque puede más la ambición y las imposiciones que vienen en vertical, que preguntarle a la base, a los simpatizantes y ya sería mucho pedirle al ciudadano que luego de la demolición, por dónde se iniciaría la reconstrucción del mismo, pero como dicen en el rancho, se me hacen muy ojones para paloma.
Inician trabajos de entrega-recepción a nivel estatal y municipal
Luego de unas vacaciones, en donde la sociedad no las cree tan merecidas, regresaron los funcionarios públicos de los tres niveles, a seguir calentando sus sillones y haciendo como que trabajaban, algunos ya preparando todo para la entrega-recepción, otros, muy ingenuos, piensan que podrán permanecer en sus puestos, por el sólo hecho que su partido ganó las elecciones el pasado 5 de junio.
Lo cierto es que en las oficinas del Palacio de Gobierno en Ciudad Victoria, en la Torre Bicentenario y demás extensiones del gobierno de Tamaulipas, donde se incluye a la Universidad Autónoma de Tamaulipas, los rostros compungidos parecen una epidemia, porque con el dolor de su corazón, deberán entregar oficinas, mobiliario, equipo automotriz y documentos, a quienes a partir del 1 de octubre, asuman responsabilidades como servidores públicos.
Mientras ocurre esto, existen muchas interrogantes, con respecto a que existen empleados y funcionarios de alto y medio pelo, que por las noches se les ve deambular por las oficinas a las que les agarraron mucho cariño, ya que durante años fueron la fuente de inspiración y veneros inagotables de algunas riquezas, sacando misteriosas cajas y llevándolas a un destino incierto.
Los mal pensados afirman que de esta manera, tanto en el gobierno del Estado, como en algunos municipios, existe una operación hormiga nocturna, para desaparecer documentos incriminatorios, para cuando llegue el relevo.
Lideran demandas por despidos injustificados en Nuevo Laredo
Pasando a otro tema menos oloroso, tenemos que alrededor de 400 demandas se han presentado en la Junta de Conciliación y Arbitraje en Nuevo Laredo, en lo que va de este año y que concierne al primer trimestre, en la mayoría, los motivos esgrimidos son por despido injustificado.
Rosendo Ramos Ortega, presidente de la Junta de Conciliación y Arbitraje en Nuevo Laredo, mencionó que en comparación, a los años pasados, se ha registrado una disminución de entre 28 a 35 demandas.
Las empresas más demandadas en esta dependencia, han sido empresas dedicadas al ramo de la seguridad privada, mueblerías, empresas transportistas y maquiladoras, siendo en este orden, las que más confrontan situaciones de desavenencia laboral.
Por hoy fue todo, para cualquier aportación de ideas, aclaración o dudas, dirigirse al correo electrónico librealbedrio57@gmail.com