La Jauría, una serie de Prime video, o Amazon. Comencé a ver después de ser recomendada por varias personas. Sí, todas ellas saben de mi inclinación hacia la lucha por la no violencia, el aborto aceptado, el patriarcado y contra las personas que con su discurso antimachista, son en realidad unas lacras machistas.
Así que la vi, es increíblemente interesante. Les voy a decir por qué, la serie parece basarse de dos grupos de niños ricos y machistas, “La manada” de España y “los Porkis” de México.”
Dos grupos de machos con familias con poder, que abusan de este para hacer lo que más les venga en gana, abusando sexualmente de unas menores de edad y haciendo de esto una mofa para la justicia, porque ella protege al grupo de poder y no a la víctima.
Y es que “la justicia”, no es ciega en realidad, está inclinada hacia quien tiene más poder, y puede tomar decisiones fuertes porque puede pagarlas, ya sea con dinero, chantaje o miedo, pero puede hacerlo. Por eso me encanta la justicia del tarot de Marsella, que no tiene venda en los ojos, y que en realidad ella, ve lo que es justo, aún a pesar de que el otro tenga poder adquisitivo o no, ve la justicia libremente, pero bueno, eso sólo sucede en el Tarot.
La serie “La Jauría” no habla nada más del abuso de una menor de edad, ¡no! Nos habla del abuso de una sociedad, donde implica a todo tipo de personas, porque no lo justificaría de un adulto, pero muchos de los implicados son menores de edad legal, hay hasta niños, porque el lobo no se fija a quién daña, sólo daña por el gusto de hacerlo.
Y pasa eso en todos los estratos y muchas de las víctimas se vuelven victimarias como en el caso del multimillonario Jeffrey Epstein, mujeres que fueron abusadas por él, se volvieron las que le llevaban a las otras chicas, es decir, pasó de ser víctima a victimaria por unos cuántos cientos de dólares… por semana.
O como lo que pasó en 1998 con Keith Raniere, un “Coach de vida”, que tenía un programa que se llamaba “Programas ejecutivos de éxito”, que impartía talleres de cinco días que cobraban hasta cinco mil dólares. Cinco años después funda NXIVM, que era un grupo que obligaba a los miembros a tomar clases adicionales, claro a mayor precio y así obtener privilegios.
En 2015 Raniere funda “Dos” que significa “Amo de las compañeras obedientes” o “el voto”. Las mujeres eran forzadas a ser esclavas sexuales y se marcaban con fuego en la pelvis con las iniciales del líder; además las “aspirantes” deberían entregar información, fotografías u videos comprometedoras, que serán usados en su contra en caso de abandono.
Raniere, argumentaba que era “una organización para empoderar a las mujeres”, sin embargo, eran sus siervas.
Y podemos señalar más casos, más grupos, más víctimas, pero creo que por eso la serie de “La Jauría” me impactó, porque vi que víctimas se convierten en victimarios, y que es una realidad aplastante; además, creo que se debe enseñar a los niños, y, al mismo tiempo, conversar sobre esta serie con ellos, pues es una realidad que vivimos y que muchas veces no vemos o no queremos ver.
La Jauría nos enseña que hay gente con mucho poder, dispuesta a crear caos, y que se encuentran en lugares privilegiados, y que no nos importa que lo tengan, porque cerramos los ojos y pensamos que no nos pasará eso a nosotros, pero pasa.
Creo que todo mundo debería ver la serie, sobre todo porque ayuda a analizar una realidad, las más desprotegidas siguen siendo las mujeres, y a los hombres, no les importa, la violencia si tiene rostro, y es rostro de varón, y que el silencio debe dejar de ser, porque estamos condenando a las generaciones futuras, por quedar callados a una situación que está en la realidad.
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