Confiados para crear
Marco Antonio Meza-Flores
Teólogo y Psicoterapeuta
La educación en América es muy vaga, y es verdad, no sólo es en México, sino en toda América, aún y que el Banco Mundial diga que Cuba tiene el mejor sistema educativo de América Latina y el Caribe, no deja de ser pobre la forma en que educamos a los estudiantes.
Hace poco escribí que “En la escuela nos enseñan que existe la creatividad, nos dicen que tenemos un cerebro para pensar, y que tenemos capacidades increíbles, pero no nos enseñan cómo usarlas, porque al final del día, los “programas” están centrados en hacer obreros y no en hacer dueños, o,. por lo menos a cumplir nuestros sueños”.
Cuando hablo de esto mucha gente se siente ofendida porque creen que yo tengo problemas con ser obrero, y ¡claro que no los tengo! Mi problema radica en que muchos de ellos no quisieran serlo, pero “no les queda de otra”, y eso porque no les han enseñado a ser creativos, a que tengan la capacidad y la necesidad de búsqueda, de investigación, de creatividad, porque un niño creativo, es un niño problemático para las nuevas y nuevos educadores de hoy, porque es inquieto y preguntón, pero ¿acaso no son los mejores alumnos los que preguntan? Decía un amigo musulmán llamado Ibrahim “no temas a quien responde, teme a quien pregunta”.
Seamos honestos con nosotros mismos ¿cuántos les gusta que les pregunten los niños? Es más, muchos temen a que ellos comiencen a preguntar porque nos veríamos demasiado ignorantes en muchas de nuestras respuestas. Pero, en realidad no es complicado decir ¡no lo sé! Al contrario, enseña a los niños a que podemos ser honestos, y lo mejor sería decir “no lo sé, pero podemos investigarlo juntos”, eso enseñaría a los niños a que una pregunta sin respuesta puede ser investigada y trabajada en equipo.
Como saben algunos de mis lectores, mis hijos son homeschool, es decir, aprenden en casa, mi hijo mayor terminó la escuela primaria casi seis meses antes que sus amigos de la edad, y la terminó con promedio de nueve punto ocho, eso fue genial para él, lo interesante es que con él puedes hablar de libros que muchos universitarios apenas si los conocen y otros apenas los están leyendo, y no se trata de leer por leer, sino de entender y saber qué quiere decir el autor y cómo puede criticar la obra, para crecimiento y lectura de comprensión.
He escuchado muchas veces de padres decir “para usted es fácil, pues usted sabe mucho”, no tardo en reír con eso, pues no es que sepa mucho, es que a mí me enseñaron a no quedarme con la duda, y muchas veces sé poquito, muy poquito para mi gusto, pero busco estar mejor preparado para poder tener mejores herramientas de conocimiento.
Debemos comenzar a confiar en lo que podemos hacer, y comenzará la magia de crear lo que soñamos, sé que no es fácil, pero con disciplina uno aprende a ser mejor y a entender mejor el mundo, y como aprendí en los boy scouts “dejar un lugar mejor de como lo encontramos”.
Así que te invito a tomar un libro, comienza con algo sencillo, uno de cuentos, leérselo a tus hijos, a tu pareja o a ti mismo te hará crecer y vivir confiado en que puedes crear un mundo mejor. ¡Qué esperas, anda, ve!
Por lo demás camina conmigo, confiados estaremos que pronto comenzaremos a crear. Un abrazo.
