Y… Comenzamos
Marco Antonio Meza-Flores
Teólogo y Psicoterapeuta
Apenas comienzan las campañas para elegir alcalde en nuestra amada ciudad de Reynosa, y la incertidumbre se puede oler en el aire.
Hay tantas preguntas que se pueden hacer para cada candidato del pueblo, algunas son válidas; otras fuera de lo común; y unas más, bueno, esas ni vale la pena mencionarlas. Pero lo que al menos yo veo alrededor, es mucha incertidumbre, algunos candidatos ya son conocidos y no reconocidos, es decir, su trabajo es tan pobre, que no vale la pena ni recordarlo; la exalcaldesa dejó mucho que desear, aunque ella cree que hizo “trabajo”, algunos preguntan ¿y tenía que esperarse hasta que viniera la relección para ponerse a trabajar? Y están los nuevos que, si bien o mal no son conocidos, sus familiares no son muy queridos por tranzas y corruptos, la realidad es que ¿qué vamos a hacer?
Lo que sí creo, es que no importa que nos gobierne el mismísimo Dios si nosotros no hacemos los cambios desde nuestros entornos, nada se podrá hacer, porque no debemos olvidar que Dios hace imposibles, nosotros hacemos posibles, pero, debemos hacerlos.
Hay tanto que pensar, hay tanto que decir, pero hay mucho más que hacer, da miedo la situación que vivimos, en un país con tan desproporcionadas riquezas, en una ciudad donde apenas si alcanza para sobrevivir, porque la gente no vive, sobrevive, y muchos etcéteras que podemos añadir, sin embargo, podemos hacer los cambios desde aquí, desde nuestras trincheras, en épocas de elección (y no sólo en elecciones), lo que vale es aprender a pensar, a entender, a leer, y no dejarse llevar por la demagogia, el hueso, la conveniencia.
Me he topado con gente en las redes que atacan a los candidatos, pero sin fundamentos, desde el chisme y el rumor, y no desde el ejercicio de su trabajo (si lo tienen claro), y le añadimos a la gente que no discierne entre “el candidato” y sus seguidores, porque los seguidores gritan, atacan y muchos son intolerantes, mientras los candidatos ni se inmutan.
Es como querer gritar todos los días que el Presidente es un inútil y no sirve para nada, y todavía creer que se siente aludido, como si Enrique Peña Nieto se levantara pensando ¿Qué pensará hoy de mi Marco? No queridos lectores, esta es una voz en el desierto, una gota en el océano, pero esa gota debe hacer su función y actuar en su entorno, no estoy en desacuerdo con las marchas ni mítines, yo mismo he participado y organizado algunos, pero de nada sirve que me ponga a marchar, si mis acciones cortas están pobres, por eso repito, la incertidumbre está, pero el cambio es nuestro, desde nuestro entorno, desde nuestra banca.
Aprender a leer los tiempos y las sazones nos toca a cada uno, no sé cuál es el mejor candidato, tengo mis “asegunes” con algunos, por la historia, porque ella, para mí, y léase con claridad “Para mí”, no son, ni deberían ser opción, porque el pasado los condena, pero te invito a leer, a buscar, a pensar y no sólo a dejarte llevar por rumores y chismes; mientras lo haces, que te parece si recoges la basura de tu entorno, y no la tires en la calle, si piensas y no das moches, no más tranzas, si usamos menos energía y apagamos focos que no usamos, si cerramos las llaves de agua, si dejamos de comprar pirata, no sé, si comenzamos a hacer lo correcto para el entorno.
Por lo demás, camina conmigo y te aseguro que será un camino fenomenal.
