Columna Camina Conmigo

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Dios nos libre

Marco Antonio Meza-Flores

Teólogo y psicoterapeuta

La situación que vivimos a veces no nos da esperanza, y digo “a veces”, porque después de escuchar algunos testimonios en donde el gobierno, el ejército y los “cuidadores de la ley”, que se supone debe poner el ejemplo y luchar contra la corrupción, llegan a ser más corruptos y los que menos siguen las leyes; sin embargo, y esperanzadoramente sigo creyendo que somos más los buenos y los que buscamos el cambio social y político positivo y sin delitos, de ahí el “a veces”.

En la ciudad se comienzan a ver retenes con la idea de “inspeccionar los autos y ver que éstos no son robados o traigan algo extraño”; sin embargo, cualquier persona con tres dedos de frente sabe que eso es simplemente para “tapar el sol con un dedo”, y en lugar de dedicarse a apresar a los delincuentes, pues ellos (el gobierno) saben en dónde están, y no sólo conocen sus casas, sino dónde operan, a qué hora y qué líderes se encuentran en esos puntos; sin embargo, se dedican a sangrar al ciudadano.

Y posiblemente algunos dirán que soy muy arriesgado para decir este tipo de cosas, sin embargo, no es así. A veces me pregunto ¿cómo diablos quieren que el pueblo reaccione si a los que trabajan honestamente les ponen más trabas y a los que son delincuentes les abren las puertas?

Basta con ver el asunto de los taxis de la ciudad, en donde muchos son piratas porque el gobierno no da las concesiones, no sabemos si se las quedan, las reparten entre ellos, o las rifan, pero la gente que es trabajadora y busca llevar el alimento a su casa con este oficio debe estar al pendiente porque el “gobierno” no quiere “cosas chuecas”, es decir, taxis piratas, como si en realidad ellos fueran muy derechos, y se los quitan y con esto creen que resuelven el problema que ellos mismos ocasionan y agravan.

Y eso nada más en cuanto a los taxis. Si nos metemos en los carros “chocolates”, con placas sobrepuestas, extranjeras, sin placas, se hace cada vez peor, pues éstos, pueden dar un billete “por debajo del agua” y nos ahorramos papeleos (?)… Lo triste es que muchos trabajadores de gobierno son los que traen este tipo de autos.

Me ha tocado ver y vivir cómo les piden “el moche” y la gente, por ahorrase tiempo o multas se los da. ¡claro! Erradicar la corrupción es tarea de todos, pero debe comenzar con el que se supone “acata la ley porque ellos son la ley”; si algún ciudadano quiere “dar para los refrescos” que lo de y que se lleve su multa por faltar a la ley.

Es cansado ver cómo no se puede trabajar porque el crimen del gobierno tampoco deja hacerlo; ya de por sí, el crimen organizado hace que la ciudadanía tenga miedo de salir de sus casas al trabajo, ahora también le tememos al gobierno y todos sus “tejes y manejes” que hacen, porque ellos “son la ley”, y “se debe respetar”. Como dice un meme, la única “ley y orden” que hay en Reynosa, sale en el canal cinco.

Dios nos libre, de todo lo que pasa en esta hermosa ciudad, de la corrupción y un gobierno que sí, trajo vientos de cambio, pero traen más desastres que otra cosa esos supuestos vientos y a caminar, para ver los cambios… si llegan.

Por lo pronto camina conmigo, será un viaje placentero y sin corrupciones.