Podría parecer y actuar como una niña pequeña, sin embargo, esta entidad que ya luce espeluznante puede ser el próximo gran avance en inteligencia artificial.
Y es que la realidad supera la ficción, y tal como ocurre con la película de 2001 “A. I. Inteligencia Artificial” escrita y dirigida por Steven Spielberg, este robot también es capaz de experimentar emociones, pues cuenta con su propia alegría, ira y tristeza.
Tong Tong fue presentado en la Exposición de Tecnologías de Inteligencia Artificial General celebrada en Beijing a finales de enero y a diferencia de los robots impulsados por IA, Tong Tong no tiene forma física.
En cambio, la entidad de IA existe y opera dentro de un entorno virtual con el que puede interactuar. Sus creadores dicen que Tong Tong muestra la inteligencia y las habilidades de un niño de tres o cuatro años.
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Según un informe del South China Morning Post, los visitantes a la conferencia pudieron hablar con Tong Tong y asignarle tareas, por ejemplo, pedirle que ordene su entorno.
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Sin embargo, la característica más singular de Tong Tong es su capacidad para autoasignar tareas.
Hasta el momento no está claro si Tong Tong es un agente verdaderamente autónomo, pero sus creadores parecen dar a entender que es mucho más independiente que la IA anterior.
