
El escurrimiento nasal es un síntoma que se asocia a resfriados, gripe o alergias, sin embargo, en ocasiones puede no durar sólo un par de días. Si tienes un moqueo que no para, conoce las causas de la rinorrea crónica y cómo tratarla.
El moqueo o escurrimiento nasal, se considera una secreción nasal excesiva, la cual puede ser acuosa y transparente, o espesa. Esto recibe el nombre de rinorrea y puede ser causada por cualquier factor que irrite la nariz o inflame los tejidos nasales.
Entre estos, el Instituto Médico Mayo Clinic menciona a las infecciones, como el resfriado común y la influenza; las alergias; los irritantes y, con menos frecuencia, pólipos nasales, un cuerpo extraño, un tumor o algunos dolores de cabeza, como la migraña.
Sin embargo, aunque puede ser molesto, suele desaparecer de forma natural y basta con sonarse la nariz suavemente, evitar los desencadenantes de las alergias o usar algún tratamiento para estas… pero ¿qué pasa cuando este moqueo no para?
¿Qué es la rinorrea crónica?
El escurrimiento nasal, suele desaparecer solo después de una semana. Sin embargo, cuando este exceso de líquido o goteo nasal es intermitente o constante, o dura más de 10 días, se considera crónico y puede ser signo de otras enfermedades.
Por lo tanto, si el escurrimiento nasal lleva más de este tiempo, acude al médico para identificar la causa, pues de esta dependerá el tratamiento. En ocasiones, puede ser necesario acudir a un alergólogo u otorrinolaringólogo.
Tratarlo es importante, pues aunque “sólo sea un moqueo”, puede afectar la calidad de vida, además, si se acompaña de congestión nasal, puede afectar el sueño y la salud de los oídos, como explican especialistas del Stanford Children’s Health.
Eso sí, si al escurrimiento nasal se le suma la fiebre alta, la secreción tiene sangre, se presenta después de una lesión en la cabeza, es una secreción con mal olor, que proviene de un solo lado o es de un color diferente al blanco o amarillo, o existe dolor facial, acude de inmediato al médico.
En menores de 2 meses, también es importante consultar con el médico, en especial si hay fiebre.
POR SALUD180





