Cuando conocí a Roberto Sepúlveda Mandujano era jefe de redacción, él disfrutaba su trabajo como nadie, pero lo máximo para Sepúlveda era escribir su columna, con su cigarro en mano, su cenicero repleto y frente a su computadora redactaba “En punto” que durante años le dio presencia en los medios donde laboró.
El tiempo que vivimos juntos siempre me dijo e insistió que escribiera una columna, pero mi respeto por este género periodístico es muy grande, hoy como un homenaje al hombre que ame, tomo el nombre de “En punto” para iniciar en esta vorágine de información de los medios de comunicación, mi columna que a partir de hoy, hago también suya estimado lector.
Vivos se los llevaron ¡Vivos los queremos!
Cuando muere un ser querido el proceso es doloroso, el velorio, el entierro es un duro trance, pero tienen un sepulcro para llorarlo, para llevar una flor, quienes han perdido un familiar víctima de una desaparición forzada, mantiene en un hilo la existencia de toda la familia, la esperanza de encontrarlos vivos es algo que nunca se pierde, ni los días, meses o años dan tranquilidad a quien dejo de ver a un hijo, hija, padre, madre, hermano o hermana que fue “desaparecido”
La ausencia duele, lacera el alma, el miedo a recibir una llamada donde te digan que la encontraron, que acudas a identificar un cuerpo, unos restos óseos, esa sensación de terror es indescriptible, a veces aprendes a vivir con eso, pero la espera nunca termina, señaló una de las integrantes de la ONG Madres Buscadoras de Sonora.
Este es un tema que duele, asombra y que causa escozor entre algunas autoridades, durante el encuentro con el Comité Internacional de la ONU con miembros del Comité de Desaparición Forzada en la ciudad de Monterrey, se expuso la situación de las víctimas de desaparición en Tamaulipas.
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Ahí el activista Guillermo Gutiérrez Riestra dijo como antecedente que los gobiernos de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto negaron la visita de este organismo a pesar de los tratados internacionales, por lo que están pidiendo una condena al gobierno mexicano por no proteger la vida y libertad de nuestras familias desaparecidas.
Es mucho lo que ha hecho el Gobierno Federal y Estatal en este tema, AMLO antes de tomar posesión como presidente de México escuchó y se comprometió con los colectivos de todo el país, incluso dijo se incrementaría el presupuesto para este tema, hoy en día sigue doliendo cada fosa clandestina que es ubicada, sigue doliendo cada hoguera, cada hallazgo y cada rastro que permiten reencontrarse con su familia a esos desaparecidos, esos levantados, secuestrados y perdidos de quien ya no habrá esperanza de regreso alguno.
En Tamaulipas, Geovanni Barrios Moreno, presidente de la asociación civil Justicia Tamaulipas, mencionó que ante el Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas o Involuntarias del Alto Comisionado de la ONU, expuso temas como la falta de apoyo a las víctimas de desaparición forzada en territorio tamaulipeco.
EL REGRESO DEL INFIERNO MEXICANO: LOS DESAPARECIDOS QUE ESTÁN VIVOS
COMO DATO
En Tamaulipas existe la Comisión Estatal de Atención a Víctimas Tamaulipas (Ceavt) con oficinas en el 15 y 16 Juárez, la comisionada es la Lic. Lorena Garrido
Hago mío el grito de ¡Vivos se los llevaron, Vivos los queremos!, porque a todos nos debe doler que las familias estén mutiladas y las sigan revictimizando.
Hoy así las cosas en este tema, agradezco su atención a mi columna, que a partir de hoy, hago suya, si la vida lo permite nos leemos en breve.